
Os debo una aclaración sobre lo acaecido el pasado jueves en las Cortes Valencianasrte, en mi ausencia.
Faltando al derecho fundamental de libertad religiosa y sin tener en cuenta el principio de una sana laicidad en una democracia plural, se me sometió, de hecho, a un juicio, sin haberme escuchado y sin defensa por mi parte.
Ni soy homófobo, ni xenófobo, ni sexista: ¡Dios me libre! Acepto a todos y no excluyo a nadie porque creo firmemente en el Señor.
No me preocupan los insultos, máxime si son por defender la justicia y lo derivado del Evangelio, me preocupáis vosotros, pueblo de Dios, el que os puedan dañar, herir y dispersar. (Leer la carta completa)
No hay comentarios:
Publicar un comentario